Publicado el: 15 de abril de 2010

TLlueve sin saber lo que estás haciendo obviamente no sirve de mucho. Es posible que notes un ligero progreso en las primeras etapas simplemente porque has tomado medidas. Pero una vez que se ha adquirido una determinada condición básica, es importante entrenar de forma específica y con objetivos predeterminados en mente. Esto sólo puedes lograrlo si desarrollas conscientemente tu entrenamiento, lo cual solo es posible si puedes medir tu cuerpo. Ir a un médico deportivo cada x cantidad de tiempo es una opción, pero lleva mucho tiempo y no es lo suficientemente frecuente. Puedes medir muchas cosas tú mismo, por ejemplo con un pulsómetro.

Al caminar o andar en bicicleta con un monitor de frecuencia cardíaca, recopila información valiosa que le permite entrenar de manera específica.

¡El cuentarrevoluciones de tu moto!

Un pulsómetro por sí solo no te ayudará a mejorar tu condición física, pero sí aprenderás cómo reacciona tu corazón ante diferentes situaciones. Sin embargo, lo más importante es realizar un análisis exhaustivo después de su formación y de su relación entre sí. Una vez que empieces a entrenar con un pulsómetro podrás compararlo todo perfectamente. Siempre se mide lo mismo, de la misma manera, el corazón. Podemos decir que a medida que la condición física mejora, el corazón latirá más lentamente porque el músculo cardíaco se vuelve más fuerte y, por lo tanto, puede bombear con más fuerza. Es decir, la misma cantidad de sangre en un menor número de contracciones. También puedes controlar fácilmente tu fase de recuperación con un monitor de frecuencia cardíaca. En general podemos decir: cuanto más rápida y fluida sea su recuperación, mejor será su condición.

Al comienzo de un período de entrenamiento, es posible que aprendas algo de la suavidad de tu respiración, pero una vez pasado cierto punto, ese conocimiento será de poca utilidad. Al seguir su ritmo cardíaco, aprende cómo responderá su corazón a los impulsos externos. Entrenamiento corto pero intensivo, entrenamiento de resistencia, entrenamiento a intervalos, todo dará un resultado diferente. Sin embargo, todavía existe una diferencia entre entrenamiento y competición. Durante el entrenamiento hay menos estímulos externos y también puedes hacer un análisis limitado durante el entrenamiento siguiendo la pantalla de tu pulsómetro. Durante una competición, y especialmente durante una competición de motos, esto es imposible y es importante tomarse el tiempo posterior para hacer o hacer hacer un análisis exhaustivo y así filtrar las imperfecciones respondiendo de manera diferente a la información que se ha obtenido.

Como ocurre con la mayoría de los deportistas de alto nivel, un pulsómetro (atención a la muñeca) es una herramienta de entrenamiento indispensable para Manuel Priem.

Manuel Priem sobre un ejemplo práctico

“Escuchar a tu cuerpo es muy importante, pero de forma honesta. ¡Hay una gran diferencia entre sentirte muy cansado y por tanto ajustar tu entrenamiento o sentirte cansado porque no te apetece!
Como corredor joven, es difícil estimar correctamente el trabajo de entrenamiento y, especialmente, cómo responderás a él durante una carrera. ¿Cuándo entrenas lo suficiente? Cuando sobreentrenar ¿Tú para que ya no estés fresco el domingo? Para mí, esto ha ido mejorando cada vez más, especialmente en los últimos dos años. Realmente es algo que tienes que aprender y un monitor de frecuencia cardíaca ciertamente puede ayudarte con eso. Un ejemplo. Un pulso matutino extremadamente alto, en comparación con sus valores normales, es una clara advertencia de que algo anda mal. En mi caso, mi pulso es 36 por la mañana, si es 50 entonces llamo a mi entrenador (Willy Linden) para discutir cómo vamos a ajustar mi entrenamiento. No me imagino entrenar sin un pulsómetro”.

Crédito de las fotos: Polar, Ray Archer.